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Afrodescendientes en el Censo de Costa Rica 2011 - Parte 1

Afrodescendientes en el Censo de Costa Rica 2011 - Parte 2

Uno de estos dias ©

Uno de estos días a eso del medio día tomemos la esperanza con los puños y abrámosla de golpe como hermanos.

Las Amigas del Camino ©

(Permítanme llorar sin tanto miedo en el hombro de la amiga que se queda) Yo quiero develar esta placa en honor a las amigas porque cuando llegué me estaban esperando y enseguida descubrieron la nostalgia en mis ojos y me armaron un nuevo sol desde su ventana se asomaron poco a poco ocupándose del silencio y de los espacios irreconciliables de la travesía. Yo hablo de las amigas del camino las que me armaron la mañana y poco a poco me hicieron espacio en su mesa para tomar el te de la tarde entre confidencias hablo de las amigas del camino no las de la escuela o las de la Universidad no las de la infancia o las del barrio hablo de las amigas del camino. Esas que he venido encontrando en cada estación en que me ha tocado detenerme esas que amaron a mis hijos y me prestaron su hombro para hacer de nuestra estancia una soledad compartida. Me refiero a las amigas del camino las que compartieron señales, hijos y jardines las de la puerta abierta el café de las tardes y la cena de los niños

ABIERTAS AL SOL ©

Llegaste un verano de mañana y entraste por la misma puerta por donde el sol usualmente se mete a la casa entraste así, sin permiso fue solo que abrí la puerta y como si nada llenaste de luz mis rincones fue necesario entonces que corriera a refrescarme las manos y los besos limpios de antes fue necesario renovar cuentos y sueños es que entraste como entra de pronto la vida llegaste pequeña con los ojos llenos de palabras y las manos cerradas como quien no quiere dejar escapar el silencio llegaste muy de mañana como quien me obliga a amanecer como quien despierta las miradas de hace años y las hace nuevas como quien encuentra que a esta casa como a la vida como a la esperanza le hace falta el sol… te quedaste entonces en las paredes en los pasos te colaste detrás y encima de los muebles detrás y encima de las madrugadas te prendiste de cada uno de los libros y me contaste una a una las historias llegaste muy de mañana en un febrero del tiempo sonriéndole al temor lo tomaste del cuello